Treinta velas al orgullo y raticida a la humildad

Hoy estoy en estado egoísta, si EGOÍSTA, decidí que voy a pensar en mi, en mi felicidad, y en lo que me hace bien o mal a mi, nada mas que a mi! Porque tengo que buscar la felicidad de los demás? Porque los demás piensan que yo soy feliz de al misma manera que ellos? No se dan cuenta que somos personas distintas? Que no nos hacen felices las mismas cosas? Que cada uno es como es, y no va a cambiar porque otro se lo pida? O así tendría que ser. Cada uno tiene que pensar como quiera, porque es libre de eso. Entonces, porque no tengo derecho a estar de mal humor? Acaso no soy una persona como cualquiera? Tengo que simular siempre felicidad? No puedo estar mal? Yo tengo que mancarme las depresiones de otros y tratar de hacerlos felices pero nadie puede aguantar las mías y entenderme? Hoy me siento incomprendida. La verdad no tengo ganas de leer el Martín Fierro, ni hacer el trabajo de Bailo, ni ir a taller mañana, ni verle la cara a Areán. Pero lo tengo que hacer igual, son cosas de al vida, no? Y si hago todo eso que no me gusta, y hago por obligación? Seré medio masoquista? Que hago cosas que no me hacen feliz por los demás? O solamente una muy muy muy buena persona, como decimos con Aye? No se, pero esto del blog me esta gustando, aunque nadie lea lo que pongo me sirve para desahogarme, jajaja.